En pleno Siglo XXI el arte todavía sigue consiguiendo su inspiración de cosas tan simples y bellas cómo las flores, tal y como se lleva haciendo desde hace siglos.
En este caso recurrimos al moderno arte experimental de Ian Wright, el cual testifica que es mejor asumir que la experiencia proviene de la experimentación que al revés.
Ian Wright es un embajador del arte del paper-makers Keaykolour, una especialidad en auge de crear cuadros, esculturas y objetos imposibles a base de papeles de gran calidad y belleza. La Exposición se llama Colourful Life, fomentada por el gigante papelero Arjowiggins Creative Papers, Wright combina una genuina pasión por el sentido del tacto, materiales de primera calidad con un apetito sin limites por la experimentación. Para esta muestra ha creado una serie de piezas empleando cortes, dobleces, plegados y esculpidos en papel para convertir conceptos culturales en tributos tangibles.
Vía / itsnicethat.com